Poet's Abbey (Blog de lecturas)


El hombre y lo divino

 


La filósofa española más grande del siglo XX es María Zambrano. Su visión poética del mundo nos enseña a descubrir la dimensión divina que tiene, en esencia, el ser humano. 

El ensayo El hombre y lo divino, reeditado en 1973, traza unas sendas para una nueva relación del ser humano con Dios, que ya rompió Hegel en el Idealismo. 

Hoy en día es más necesario que nunca leer a la filósofa que reclama la piedad como puente para la libertad auténtica, la rehumanización del mundo.

Así como la filosofía, buscando la verdad, encuentra la belleza; la poesía, buscando la belleza, encuentra la verdad. Porque "si la filosofía es la que pregunta, la poesía es la que encuentra. Filosófico es el preguntar y poético el hallazgo. -¿Todo hallazgo, no será siempre poético?"



Una cultura depende de la calidad de sus dioses, de la configuración que lo divino haya tomado frente al hombre [...], de la exigencia y de la gracia que el alma humana a través de la imagen divina se otorga a sí misma.


El tiempo es el horizonte que presenta la muerte perdiéndose en ella.


Poesía y filosofía serán desde el principio dos especies de caminos que en privilegiados instantes se funden en uno solo.


Transformar el mundo no es otra cosa que modificar eso último para lo que no tenemos nombre, la inserción del hombre en el universo, la situación con referencia a todas las especies de la realidad, de lo que es y de lo que no es. (p. 232)


Filosofía es mirada humana. Y el amor que está en la misma palabra que designa la acción de filosofar dice ya de su intervención decisiva. La filosofía es mirada creadora de horizonte.


Sólo se entiende plenamente el "Dios ha muerto" cuando es el Dios del amor quien muere, pues sólo muere en verdad lo que se ama, sólo ello entra en la muerte: lo demás sólo desaparece. (p. 175)


María Zambrano, El hombre y lo divino, 1955

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